Regulaciones de criptomonedas de EE. UU.
Estados Unidos ha tenido una historia larga y complicada con las regulaciones sobre criptomonedas. El gobierno federal del país ha tardado en crear marcos legales integrales para el uso y el comercio de activos digitales, dejando la regulación en gran medida en manos de los estados individuales. Esto significa que diferentes jurisdicciones en Estados Unidos pueden tener reglas muy diferentes cuando se trata de criptomonedas como Bitcoin y Ethereum.
Sin embargo, en los últimos años se han presentado en el Congreso varios proyectos de ley relacionados con la legislación sobre criptomonedas y los reguladores poco a poco están empezando a prestar atención a esta clase de activos emergente. Es importante que los comerciantes que operan dentro o fuera de los EE. UU., especialmente aquellos que planean realizar negocios con ciudadanos estadounidenses, se mantengan actualizados sobre los últimos desarrollos relacionados con la regulación de las criptomonedas en el país para que puedan cumplir con las leyes pertinentes y evitar cualquier riesgos potenciales asociados con ellos.
Un ejemplo es el programa BitLicense de Nueva York, que se estableció en 2015 como un esfuerzo de los legisladores estatales para regular las empresas de moneda virtual que operan dentro de sus fronteras; las empresas deben solicitar una licencia antes de ofrecer servicios como compra/venta o tenencia de criptomonedas en nombre de los clientes ubicados allí (esto no incluye la minería). En abril de 2021, al menos 28 estados aprobaron sus propias versiones de legislación sobre criptomonedas diseñadas específicamente para activos digitales, mientras que otros estados, como Oregón, propusieron una orientación más general sobre la tecnología blockchain destinada a promover la innovación sin sofocar el crecimiento mediante una regulación excesiva (la Ley de Activos Digitales de Oregon). Ley de Transacciones).
A nivel federal, se han logrado algunos avances en los últimos años, incluida la introducción de dos proyectos de ley del Congreso: uno que propone estándares uniformes en los cincuenta estados, mientras que otro busca brindar claridad sobre cómo se deben gravar ciertos tipos de transacciones que involucran criptomonedas, pero aún queda mucho por hacer. Aún queda mucho por hacer antes de que veamos algo parecido a una política unificada desde Washington DC. Hasta entonces, quedará en manos de cada gobierno estatal si deciden implementar medidas más estrictas o optar por no regular lo que muchos consideran un experimento tecnológico aún novedoso que podría perturbar los mercados financieros tradicionales si se les da suficiente tiempo y una supervisión adecuada.
