La prueba de participación (PoS) es un algoritmo de consenso utilizado por algunas criptomonedas para validar transacciones y generar nuevos bloques. A diferencia del sistema de prueba de trabajo (PoW), que requiere que los mineros resuelvan ecuaciones matemáticas complejas para crear nuevos bloques en la cadena de bloques, PoS no requiere ninguna potencia computacional. En cambio, los usuarios son recompensados por apostar sus monedas para validar y aprobar transacciones.
En los sistemas PoS, los validadores deben poner una participación (monedas o tokens) como garantía antes de poder participar en los procesos de creación de bloques y verificación de transacciones. Esto significa que los actores maliciosos no pueden manipular fácilmente la red porque corren algo en riesgo si intentan un ataque. Además, dado que no se requieren equipos de minería costosos con los algoritmos PoS, permite que cualquier persona con monedas o tokens se convierta en validador sin necesidad de hardware especializado para minar bajo otros algoritmos de consenso como PoW.
En comparación con los sistemas de prueba de trabajo como el algoritmo SHA-256 de Bitcoin, PoS tiene varias ventajas que incluyen: costos de electricidad reducidos; escalabilidad mejorada; velocidades de transacción más rápidas; menos riesgos de centralización; mayor seguridad debido al requisito de que los validadores posean una participación en la red; mejor distribución de recompensas entre los participantes que poseen grandes cantidades de monedas/fichas; y mejora de la eficiencia energética al reducir la cantidad de trabajo realizado por cada nodo participante en la red.
En general, la Prueba de participación ofrece muchos beneficios sobre los protocolos de consenso de prueba de trabajo tradicionales y, al mismo tiempo, proporciona sólidas medidas de seguridad contra actores maliciosos que intentan realizar doble gasto o ataques 51% en redes que ejecutan este protocolo.