Las cartas de crédito consecutivas son una forma de transacción financiera garantizada que se utiliza en el comercio internacional. Se trata de dos cartas de crédito separadas, una emitida por el banco del comprador al vendedor y otra emitida por el banco del vendedor al comprador. Estas cartas brindan seguridad de que el pago se realizará al recibir bienes o servicios de cualquiera de las partes.
El propósito de las cartas consecutivas es reducir el riesgo para ambas partes involucradas en un acuerdo comercial internacional. El acuerdo implica que dos bancos independientes emitan sus propias cartas que garantizan el pago en nombre de cada parte en caso de que surja algún problema durante el proceso de transacción. Al utilizar dos bancos diferentes, se eliminan posibles problemas con intereses en conflicto o información poco confiable, proporcionando así más seguridad para ambas partes involucradas en el intercambio.
El proceso comienza cuando una empresa quiere comprar bienes de un proveedor extranjero pero no quiere pagar por adelantado sin recibir nada a cambio. Para protegerse contra el fraude o la falta de pago, solicitan una carta consecutiva a su banco y la entregan al banco de su proveedor como garantía antes de realizar el pago contra reembolso (COD). Esto garantiza que incluso si algo sale mal durante el envío o la entrega, aún pueden cobrar una compensación por las pérdidas incurridas debido a mercancías defectuosas o envíos retrasados, etc., siempre que todos los términos descritos en los contratos/cartas se cumplan de acuerdo con las regulaciones establecidas por los sistemas bancarios de ambos países.
Para completar este tipo de transacción con éxito se requiere un amplio conocimiento y experiencia con las prácticas financieras globales y las leyes que las rodean, particularmente aquellas entre diferentes naciones, como los tipos de cambio de divisas y los derechos e impuestos aduaneros, etc. También requiere confianza entre los socios, ya que uno debe depender de otro completa su parte de manera precisa y oportuna para que todos los pagos se realicen sin problemas sin que surjan complicaciones posteriores con respecto a las discrepancias sobre lo prometido en el momento de la etapa de confirmación del pedido versus lo que realmente se entregó, respectivamente, al nivel del destinatario final (comprador/vendedor). Como tal, se ha tenido especial cuidado al seleccionar socios comerciales con los que planea interactuar regularmente; Se debe realizar una investigación sobre cuán confiables han sido los clientes/proveedores anteriores antes de celebrar un contrato juntos, de lo contrario, podrían tener consecuencias potencialmente devastadoras desde el punto de vista financiero en el futuro si se confía demasiado en la integridad de los demás únicamente sin que se tomen medidas suficientes de antemano para salvaguardar el interés de uno por encima de todo. ¡demás!
