IMF G20 Crypto es un acuerdo entre el Fondo Monetario Internacional (FMI) y los países del Grupo de los 20 (G20) para establecer un conjunto de directrices para la regulación de las criptomonedas. El acuerdo se anunció por primera vez en la cumbre del G20 de 2019 en Osaka, Japón.
El propósito de este acuerdo es crear estándares uniformes en todo el mundo con respecto a cómo las diferentes naciones manejan las criptomonedas, como Bitcoin y Ethereum. Esto sería beneficioso tanto para los gobiernos como para los ciudadanos: permitiría a los gobiernos realizar un mejor seguimiento de las transacciones, combatir el lavado de dinero y otras actividades ilegales, y al mismo tiempo brindaría a los ciudadanos más seguridad de que sus inversiones están a salvo de robo o manipulación.
Específicamente, las regulaciones criptográficas del G20 del FMI exigen leyes a nivel nacional que definan lo que constituye un proveedor de servicios de activos virtuales (VASP), impongan requisitos de conocimiento de sus clientes a los VASP, exijan informes de actividades sospechosas dentro de las 24 horas, brinden orientación sobre anti-dinero. medidas de lavado, como la adhesión a estándares globales como las recomendaciones del GAFI, promueven la innovación responsable a través de marcos de pruebas que permiten a las empresas realizar experimentos sin una supervisión regulatoria completa por adelantado; y fomentar la cooperación internacional entre los reguladores al investigar casos transfronterizos que involucren activos digitales.
Además de estos requisitos impuestos por las regulaciones criptográficas del G20 del FMI sobre los sistemas legales de cada país que rigen a los proveedores de servicios de activos virtuales (VASP), es probable que se publiquen más especificaciones técnicas de implementación a finales de este año, que pueden incluir pautas relacionadas con protocolos de seguridad de red y algoritmos de cifrado. utilizado por VASP; medidas de privacidad de datos; soluciones de almacenamiento; protocolos de autenticación, etc., todos destinados a garantizar que se sigan las mejores prácticas al tratar con criptomonedas en todo el mundo.
